Gimnasia abdominal hipopresiva

La gimnasia abdominal hipopresiva (GAH) es una técnica que está especialmente indicada en casos de debilidad de la musculatura del suelo pélvico.

Realizándola, conseguimos fortalecer los músculos del periné y abdomen y prevenimos las ptosis o caídas de los órganos pelvianos.

Consiste en una serie de posturas mantenidas en el tiempo que junto al ciclo respiratorio adecuado consigue una activación refleja de la musculatura pélvica. Se denomina hipopresiva porque al realizar el ejercicio disminuimos la presión intraabdominal debido a la relajación del diafragma torácico. Esto, a su vez, provocará una activación refleja de la musculatura del suelo pélvico y de la faja abdominal.

¿En qué casos está indicada la GAH?

Recuperación postparto: Durante el embarazo y el parto la musculatura del periné se debilita. El aumento de peso que tiene que soportar esta musculatura durante el embarazo y las maniobras que muchas veces son necesarias en el momento del parto (episiotomía, fórceps…), provocarán que tras un periodo más o menos corto, muchas mujeres noten sensación de falta de fuerza. Aunque estos músculos de por sí, tienen una gran capacidad de recuperación y pueden no dar sintomatología en un primer momento, es importante que hagamos una adecuada prevención postparto.
Incontinencia urinaria leve y prolapsos grado I: Un prolapso es la caída y pérdida de función de alguna víscera abdominal que puede dar lugar a incontinencia urinaria. En grados II y III el tratamiento constará además de otras técnicas aunque la GAH seguirá siendo un gran complemento para la recuperación funcional y posicional de las vísceras.
Menopausia: con la GAH conseguimos tonificar esta musculatura antes de que el cambio hormonal la debilite.
Potenciación abdominal: con la GAH definimos nuestra cintura sin dañar nuestra región lumbar o el suelo pélvico.
Mejora problemas lumbares: Eficaz en personas que presentan frecuentemente dolor de espalda o lesiones en esta región. El fortalecimiento abdominal es esencial en la recuperación y rehabilitación de las patologías lumbares.
Reeducación postural: con la GAH se fortalecen los principales músculos estabilizadores (musculatura abdominal, lumbar profunda y suelo pélvico) que será fundamental para una correcta colocación de nuestro cuerpo.
Mejora la actividad sexual: aumentando la propiocepción y la fuerza en el periné.
Mejora el estreñimiento: la GAH favorece el tránsito intestinal.